El Concilio Vaticano II admite que «también entre nuestros hermanos separados ha surgido un movimiento [el de la unidad] cada día más amplio, por la gracia del Espíritu Santo, para restablecer la unidad de todos los cristianos» (UR 1).…
El Concilio Vaticano II admite que «también entre nuestros hermanos separados ha surgido un movimiento [el de la unidad] cada día más amplio, por la gracia del Espíritu Santo, para restablecer la unidad de todos los cristianos» (UR 1).…